La Justicia de Paso de los Libres dictó la prisión preventiva del único detenido que tiene el millonario robo de dinero, joyas y armas de una estancia en la que viven una jubilada y su sobrina discapacitada.
Al mismo tiempo, se conoció una situación insólita: los investigadores dijeron que un error de la Policía en la toma de la denuncia ubicó el botín en mil millones de pesos -entre dólares y moneda nacional- pero que, en realidad, la cifra asciende a unos 30 millones de pesos.
Fuentes vinculadas a la investigación indicaron que cuando el hijo de la víctima realizó la denuncia ante la Policía de Corrientes señaló que los delincuentes se llevaron "cinco millones de pesos en dólares" y no "de dólares", como quedó asentado.
Por el hecho fue detenido un ex peón de la estancia que fue reconocido por su voz y porque aparentemente dejó en la propiedad una linterna que sus patrones le habían regalado apenas unas semanas antes de ser despedido. El juez de Garantías ordenó la prisión preventiva por 90 días.
Mientras, la Policía y el fiscal Mauro Casco intensifican las investigaciones para identificar a los otros dos delincuentes y recuperar al menos las armas y joyas robadas del casco de la estancia.
Tal como contó Clarín este miércoles, el asalto se produjo en la madrugada del viernes 20 y fue denunciado por un hijo de la víctima, que vive en Paso de los Libres.
José Pasetto (45) relató que el asalto se produjo cerca de la una de la madrugada del 20 de mayo cuando su madre, Nilda Susana Solán (78), y su sobrina discapacitada se hallaban descansando en la propiedad que tienen en la sección rural "San Salvador", que está sobre ruta provincial 49, en el paraje Loma Porabé, a unos 80 kilómetros de Paso de los Libres.
Pasetto dijo que se enteró del episodio cerca de las 6.30, a partir de un llamado telefónico de otro peón.
El hombre desembarcó en la estancia con una comisión policial y allí encontró a su madre con severos golpes en todo el cuerpo y una crisis nerviosa por la situación vivida.
Los agentes establecieron que los asaltantes entraron en la casona tras destrozar una puerta posterior. Pasetto dijo que los ladrones se llevaron dos rifles calibre 22, una pistola calibre 9 milímetros, dos escopetas calibre 12, una de ellas doble caño; un revólver calibre 38 largo, otro de calibre 32; tres escopetas calibre 14, una de ellas de colección y de altísimo valor en el mercado. Además, notó el faltante de un fusil Mauser, otra reliquia familiar.
Los tres asaltantes tuvieron tiempo también para apoderarse de todo tipo de joyas de oro y plata y una bombilla que tenía incrustaciones de piedras preciosas, celulares y otros elementos de alto valor. Y de todo el dinero que la mujer había ahorrado a lo largo de una vida dedicada a las tareas rurales, además de las ganancias de un quiosco de su propiedad tras jubilarse.
La mujer indicó que, si bien los delincuentes ocultaban sus rostros con capuchas, pudo reconocer la voz de un joven que había sido empleado en la estancia. Lo mismo declararon dos peones que pusieron en fuga a la banda.
Por su parte, Pasetto reconoció una linterna -de color celeste con negro- que le había regalado a ese peón -apodado "Cabecita"- unas semanas antes de despedirlo.
El sospechoso fue detenido en un paraje cercano y se allanó su casa. Desde la Justicia dijeron que aún no tienen datos sobre el destino que tuvo el dinero, armas y joyas robadas de la estancia. En el caso también intervino la comisaría segunda de Paso de los Libres.